La cifra de víctimas de la violencia en Siria ronda las 14.000 personas.
SIRIA.
Abdel Baset Sida, el nuevo líder de la oposición siria, ha hecho un llamamiento a las deserciones del régimen, que según él está «en las últimas» tras las recientes matanzas.

(REUTERS)
El Consejo Nacional Sirio (CNS), la principal coalición de la oposición al régimen de Assad, decidió elegir como nuevo jefe al kurdo Abdel Baset Sayda, exiliado desde hace años en Suecia, por su reputación de moderado, a pesar de ser un desconocido y de su falta de experiencia política.
«Entramos en una fase delicada. El régimen está en las últimas. Las masacres que se multiplican y los bombardeos muestran que está luchando por sobrevivir», dijo poco antes a la agencia AFP el nuevo líder del CNS, un organismo que reúne a islamistas, liberales, nacionalistas, independientes y militantes en el terreno. «Según las informaciones que tenemos, el régimen perdió el control de Damasco y de otras ciudades», añadió Sayda sin dar más precisiones.
Los combates se han intensificado recientemente en la capital, que, sin embargo, sigue siendo la ciudad mejor protegida por las fuerzas del régimen. «El plan (de salida de la crisis del emisario internacional Kofi) Annan todavía existe, pero no se aplica. Vamos a hacer lo necesario para que este plan se incluya dentro del capítulo VII» de la Carta de Naciones Unidas, lo que permitiría sanciones económicas y, quizás, el uso de la fuerza, dijo Sayda.
Desde que empezó la revuelta contra el régimen, en marzo de 2011, murieron un total de14.115 personas, en su mayoría civiles, según nuevas cifras difundidas este domingo por el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).