Sexto día de fuertes disturbios en Irlanda del Norte
IRLANDA.
PRENSA LATINA.- Una sexta jornada de violentos disturbios coincidió hoy con el izado de la bandera británica en la alcaldía de esta ciudad norirlandesa, por primera vez desde la toma de una polémica decisión en ese sentido, detonante de las revueltas.
El Servicio Policial de Irlanda del Norte (PSNI) informó que debió dispersar a grupos de manifestantes unionistas, favorables a mantener a esta provincia dentro del Reino Unido, que lanzaron contra los agentes petardos y bombas caseras en esta urbe.
Aunque no se registraron heridos y el nivel de violencia fue menor, las autoridades norirlandesas muestran preocupación por lo que sucederá esta noche, cuando toque bajar la insignia británica, tras la celebración del cumpleaños 31 de Catalina, la duquesa de Cambridge, esposa del príncipe Guillermo.
Una dividida decisión de los concejales del ayuntamiento de Belfast, el pasado 3 de diciembre, estipula que la también conocida como Union Jack ondeará en el edificio de esa institución solo 18 días señalados en el año, en lugar de hacerlo de forma permanente como ocurría desde 1906.
Las fechas escogidas serían, entre otras, los cumpleaños de la familia real, los aniversarios de coronación y asunción de Isabel II y el día de la Mancomunidad de excolonias británicas (Commonwealth).
Tal decisión fue propuesta por el Partido multiconfesional de la Alianza para dar neutralidad a la alcaldía de esta urbe, dividida en sectores de mayoría católica, partidarios de la unificación con el resto de la isla irlandesa (republicanos), y los unionistas, en su mayoría de religión protestante.
Elementos radicales unionistas iniciaron demostraciones pacíficas contra la decisión del ayuntamiento que pronto desembocaron en disturbios, durante los cuales fueron destruidos comercios y quemados vehículos, con daños calculados en unos 11 millones de dólares.
La víspera, la policía separó a manifestantes unionistas y a jóvenes nacionalistas en el este de Belfast, de mayoría católica, y empleó carros hidrantes y balas de goma para dispersar las protestas.
Diputados del opositor Partido Laborista británico consideraron que los disturbios en Irlanda del Norte se convierten en un asunto de seguridad nacional para el Reino Unido.
El Acuerdo de Viernes Santo, alcanzado en abril de 1998, sentó las bases para el fin de más de 30 años de enfrentamientos entre republicanos y unionistas, en medio de la presencia militar británica, la creación de un gobierno compartido y la formación de una policía integrada, entre otras medidas de paz.
09/Enero/2013.
The New Factor 