Los yihadistas de Malí usan civiles como escudos humanos contra la ofensiva francesa
MALÍ.
«En caso de duda, no vamos a disparar», ha declarado Edouard Guillaud. jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas francesas.
El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas francesas, Edouard Guillaud, ha comunicado este miércoles que las operaciones terrestres se están viendo obstaculizadas porque los rebeldes islamistas están usando a la población civil como escudos. «Nos negamos categóricamente a que la población civil sufra daño alguno. En caso de duda, no vamos a disparar», ha declarado Guillaud.
Los residentes que han huido de la localidad de Diabaly, bajo control rebelde desde lunes, han confirmado que desde hace varios días los islamistas están usando a los habitantes de la ciudad para protegerse. Francia ha hecho un llamamiento de apoyo internacional contra los insurgentes islamistas a los que consideran una amenaza para África y para occidente. Asimismo, el ministro de Defensa francés, Jean-Yves Le Drian, ha reconocido que Francia se enfrenta a una operación difícil, sobre todo con los combatientes extranjeros pertenecientes a Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
«Es duro. Sabíamos desde el principio que sería una operación muy difícil», ha asegurado Le Drian. Mientras, los jefes militares de laComunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) se reúnen por segunda vez en Bamako en un intento por concretar los detalles del despliegue del mandato de Naciones Unidas. Ante los retos logísticos y de transporte a los que se enfrentan las tropas africanas, Alemania ha prometido enviar dos aviones de transporte militar para trasladar a los soldados a los alrededores de la región de Bamako.
El conflicto en Malí ha levantado preocupaciones en los países del África occidental ante una posible radicalización del Islam en la región. En Senegal, el presidente,Macky Sall, previno el martes en a sus ciudadanos para que estuvieran vigilantes ante un posible ataque. «Tenemos que permanecer atentos en nuestras ciudades y en nuestros pueblos porque se están produciendo infiltraciones», advirtió el martes en un discurso. «Escucharéis a predicadores extranjeros hablar en nombre del Islam. Tenéis que denunciarlos a las autoridades», ha asegurado.
Se estima que el conflicto ha provocado el desplazamiento de unas 30.000 personas en el interior del país y que cientos de ellas están huyendo a los países vecinos a través de las fronteras. «Todos teníamos miedo. Muchos combatientes jóvenes se han unido a ellos recientemente», ha explicado un conductor de camiones de 35 años que huyó a Níger, Mahamadou Abdoulayé.
17/Enero/2013. – 18:35 hrs.